Las protectoras de animales tienen como su principal objetivo proteger a los animales que se encuentran en situación de riesgo, ya sea por abandono, maltrato o negligencia. Su función se extiende a ofrecer un refugio seguro, atención médica, alimentación adecuada y la búsqueda de un hogar definitivo para aquellos que no tienen familia. Además, buscan educar a la sociedad sobre la importancia de la adopción responsable y el respeto por los derechos de los animales. Las protectoras también abogan por leyes más estrictas contra el maltrato animal y promueven campañas de esterilización para controlar la sobrepoblación.
Salvaguardar el bienestar animal y fomentar la adopción responsable.